IA (2)
marzo 3, 2023 § Deja un comentario
En un mundo en el que haya replicantes por todas partes —en donde no podamos distinguir a un humano de un maquina inteligente— la sospecha de que el otro sea un extraño será una sospecha habitual, por no decir, por defecto. Y no solo un extraño, sino también un ser superior con el que habrá que andar con cuidado. Al final, resultará que, a través del progreso tecnológico, volveremos a la sensación de estar rodeados de dioses. Y quizá entonces nos demos cuenta de que el viejo Dios del monoteísmo, aquel que echamos por el desagüe junto con el agua sucia, fue en realidad una liberación. Pues mientras duró su hegemonia ningún dios fue en verdad divino.