operarios, al fin
marzo 16, 2022 § Deja un comentario
Las formas —el rito, la institución— son necesarias. Pues, al final, solo nos quedarán las formas, acaso el mayor signo de fidelidad, del querer. Ellas son nuestro andamio. Pues es ingenuo suponer que el sentimiento es todopoderoso. Las formas tienen mala fama. Demasiado judías, decimos. Pero ahí reside nuestro error: en creer que las formas son insinceras, cuando lo cierto es que no cabe, en definitiva, mayor sinceridad. Sin embargo, es cierto que demasiado andamio nos aleja de la tierra. Difícilmente vamos a dar en el clavo con el decir lo que es. No hay plata sin ganga. Y el minero que las separe aún está por venir.
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