del poeta y las palabras
julio 13, 2022 § 1 comentario
¿Decir te quiero? No es suficiente. O no lo es, donde cabe decirlo. Aunque sea verdad. Las grandes palabras necesitan volver a ser dichas de otro modo. Pues con el uso se desgastan. Como los cuchillos, tienen que afilarse de vez de cuando. De ahí la necesidad del poeta. Pues fue un poeta quien le dijo por primera vez a su amada me has robado el corazón. O aquel que se atrevió a decir, contra el prejuicio religioso, que Dios es nuestro padre.
EL INFINITO -IDILIO I-
Siempre amé este yermo monte,
y este promontorio, que me oculta
la visión del último horizonte.
Mas sentado, contemplando
los interminables espacios lejanos,
los silencios sobrehumanos y su profundísima quietud,
se extravía el pensamiento,
hasta casi liberar mi corazón del miedo. E igual que el viento
susurra entre estas plantas,
en el infinito silencio mido mi voz:
y me subyuga lo eterno, y las estaciones muertas,
y la presente y viva, con toda su sonoridad.
Así a través de esta inmensidad se ahoga el pensamiento:
y naufragar en este mar me es dulce.
LEOPARDI, G, Cantos (1831), Canto XII