no sabría qué decirte
marzo 11, 2022 § 3 comentarios
Por lo común, hablamos por hablar. Esto es, sin tener mucha idea del asunto (pero como si la tuviéramos). La mayoría de nuestras conversaciones son cháchara. Bullshit. De ser honestos, no pararíamos de decir en realidad, no sabría qué decir. El precio a pagar, sin embargo, sería el de la interrupción. El trato difícilmente puede continuar. Y esto es lo mismo que decir que no podemos conversar con el sabio. En cualquier caso, seguirle en el juego de la interrogación (y esta es una de las moralejas de los diálogos platónicos). O en su defecto, hablar de fútbol. Una vez puestos a decir tonterías, mejor hacerlo bien.
En efecto, seguir el juego de la interrogación desde la humildad de la ignorancia. Un continuo tanteo, forcejeo compartido con la realidad que se resiste.
Aprovecho la ocasión para darle las gracias por sus inspiradores comentarios.
Jordi Mateu.
El silencio prudente en nuestra cultura del ruido y de la imagen constantes cotiza a la baja.
De nada, Jordi.